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Fotografía tomada durante uno de los encuentros
Fotografía tomada durante uno de los encuentros

Arrancan los espacios de encuentro de familias de la Asociación Navarra de Autismo (ANA)

  • Con estos espacios se persigue propiciar un espacio colaborativo entre familias en el que pongan en común todas las experiencias posibles en un entorno protegido.

 

Los días 12 y 13 de noviembre la Asociación Navarra de Autismo (ANA) ha retomado los espacios de encuentro para las familias de la entidad. Tras recibir varias peticiones y con la premisa de que es de vital importancia, además de la atención a la persona con Trastorno del Espectro del Autismo (TEA), atender a su entorno familiar, la asociación creyó oportuno crear un “Espacio de Encuentro” dirigido a las familias. Amenizado por Paula Rodríguez, directora de ANA y trabajadora social, con este tipo de encuentros, se persigue propiciar un espacio colaborativo entre familias, en el que pongan en común todas las experiencias posibles en un entorno protegido, con el objetivo de poder ayudarse unos a otros, compartiendo las mismas inquietudes, experiencias y sentimientos. La iniciativa ha tenido una gran acogida y se desarrollará de manera periódica a lo largo del año con distintos grupos.

Fotografía tomada durante uno de los encuentros
Fotografía tomada durante uno de los encuentros

Objetivos de la entidad:

ANA contribuye, con apoyos, servicios y oportunidades, a promover y mejorar la calidad de vida de las personas con Autismo y su entorno, así como a facilitar su inclusión como ciudadanos de pleno derecho. Para ello la asociación desarrolla una respuesta integral y personalizada adecuada a sus necesidades y a la de sus familias.

Es una entidad reconocida como Entidad de Utilidad Pública, miembro del CERMIN, de AUTISMO ESPAÑA y AUTISMO EUROPA y apoyada por las administraciones y otros agentes sociales que trabaja por y para lograr que todas las personas a las que atiende, cuenten con los apoyos necesarios para desarrollar una vida lo más plena y feliz posible en una sociedad que reconozca, respete y promueva condiciones para la participación, la igualdad y el logro de una ciudadanía plena, garantizando las condiciones mínimas de dignidad de vida que estas personas merecen como ciudadanos más desprotegidos. Para ello se compromete a gestionar, promover y defender un modelo de recursos integral que genere oportunidades, a lo largo de todo el ciclo vital de las personas con TEA y sus familias.

Fuente: Asociación ANA.