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Foto de pupitres vacíos en un aula escolar.
Aula escolar vacía. (Pixabay).

Las familias del alumnado con discapacidad demandan más información al inicio del curso escolar

  • Estas familias viven con incertidumbre los comienzos de curso por desconocer con antelación los recursos técnicos y humanos con los que van a contar sus hijos e hijas en los centros en los que cursan sus estudios.

El movimiento asociativo CERMIN solicita que toda la información referente a recursos humanos y técnicos asignados para el alumnado con discapacidad sea comunicada a sus familias de manera previa al inicio del curso escolar.

Manifiestan que, en ocasiones, el curso escolar arranca con ausencia de estos recursos durante las primeras semanas, posicionando al alumnado con discapacidad en una situación de desventaja con respecto al resto de sus iguales. Esto sucede tanto con el profesorado especialista y/o de apoyo, como con los recursos técnicos y tecnológicos de los que son titular de derecho.

Además, con la apertura del curso escolar, y coincidiendo con la incorporación de nuevo personal docente, el traspaso de información sobre las necesidades de este alumnado no se realiza a tiempo en bastantes ocasiones. Esto supone la demora en la puesta en marcha de los mecanismos y recursos requeridos para la atención a necesidades de la infancia y juventud con discapacidad en sus centros educativos.

Las familias necesitan tener toda la información antes del inicio del curso, y recibir comunicación de cada una de las incidencias que puedan darse, conociendo, a su vez, las soluciones que se vayan a articular por parte de los centros educativos. Requieren saber, entre otras cuestiones, el número de horas asignadas de apoyo tanto de profesionales especialistas como del personal auxiliar técnico educativo. De igual manera, saber qué recursos técnicos son necesarios y si están ya operativos en el centro.

Facilitar esta información disminuiría el estrés que las familias del alumnado con necesidades educativas especiales sufren en los meses próximos al inicio del curso escolar. A su vez, redundaría en una mayor colaboración de estas familias con los centros escolares, mejorando la comunicación y coordinación entre todas las partes.

Según los datos e información con la que cuenta CERMIN, todo lo señalado hasta el momento no es una situación puntual ni exclusiva de los últimos años, sino que responde a una problemática estructural del sistema educativo para la atención a la diversidad.